Consejos para una piel suave y sana

Mantener la piel limpia y suave no es solo una cuestión estética, sino que promueve el bienestar general de la piel y el cuerpo.

Los hábitos alimenticios incorrectos, la contaminación del aire, las quemaduras solares, los tratamientos de belleza invasivos y muchos otros factores pueden hacer que nuestra piel se resienta y que luzca cansada y apagada.

Aquí te traemos estos consejos para lucir una piel suave y sana, con la ayuda de algunos remedios cosméticos como son los exfoliantes corporales que tienen innumerables beneficios en cuanto a regeneración de la piel.

¿Cómo trabajan los exfoliantes? Al eliminar la capa más superficial de la epidermis -la que se considera "muerta"- favorecen la regeneración celular de los tejidos y con ella toda una serie de beneficios, tanto visibles como perceptibles.

¿Alguna vez has notado que al caminar mucho tiempo sobre la arena, en verano tus pies se sienten más suaves? ¡La arena es un excelente exfoliante natural para las zonas más difíciles!

Exfoliación mecánica vs. exfoliación química

El exfoliante es uno de los métodos de exfoliación denominados “mecánicos” , es decir, se realiza mediante frotamiento físico, por decirlo de forma sencilla. Cepillos, guantes y esponjas exfoliantes también entran en esta categoría. Sin embargo, también existen exfoliantes químicos que explotan la llamada acción queratolítica, es decir, destruyen la parte más superficial de la epidermis -la formada por células muertas- estimulando así la producción de nuevas células superficiales.

Este tipo de exfoliantes deben usarse con más precaución, ya que dependiendo del tipo de ácido utilizado y su concentración, puede causar lesiones cutáneas graves, si no es tolerado por la piel. Aunque hay muchos peelings químicos seguros en el mercado, para un tratamiento serio y bien hecho siempre es mejor recurrir a manos expertas.

Pero cuidado, aunque es muy beneficioso y seguro, tampoco se debe subestimar el exfoliante: si se usa con demasiada frecuencia o en zonas delicadas y sensibles, puede causar inflamación y, en el peor de los casos, excoriar la piel.

¿Cómo elegir los mejores exfoliantes?

Es importante darle prioridad a varios aspectos y elementos, que hacen un producto seguro, eficaz y de calidad. 

Estos son los principales criterios de selección:

Ingredientes naturales y seguros para la piel: Son productos con gránulos de origen natural como por ejemplo la sal, azúcar o granulados varios producidos a partir de granos y cáscaras. Un buen exfoliante debe contener alrededor de un 80 % de ingredientes naturales, como extractos y aceites.

Eficacia: para que un exfoliante haga su trabajo de manera excelente, debe estar equilibrado, tanto en el grano como en el "portador". Significa que los componentes abrasivos deben tener un cierto espesor y que el gel/aceite/crema que los lleva debe tener ciertas propiedades. Algunos exfoliantes están diseñados para dejar la piel lo más suave posible, otros para purificarla y otros para estilizar y drenar las áreas difíciles.

Función: cada exfoliante realiza una función diferente y hemos tratado de crear una colección de los mejores exfoliantes que se ajusten a todas las necesidades. Con sal, azúcar, adelgazante, super natural y ecológico: ¡hay para todos los gustos!

Precios: encontrarás productos de muy alta calidad, algunos en el rango de precios premium, ¡otros realmente muy baratos!

Alternativas a los exfoliantes corporales

¿Existen alternativas al exfoliante corporal? Pues sí, aunque difieren entre sí.

Cepillos secos corporales

Se denominan cepillos secos, para realizar el llamado “cepillado en seco”. Se trata de cepillos grandes (como los que usaban nuestros abuelos para la ducha) hechos de madera y con cerdas naturales bastante rígidas. El cepillado debe hacerse en seco y elimina las células muertas favoreciendo además la microcirculación.

La diferencia con el exfoliante es que el cepillo no realiza ninguna acción hidratante, por lo que se compensará posteriormente con la aplicación de una manteca corporal, un aceite o cualquier producto hidratante.

La principal ventaja radica en su bajo costo: una vez comprados, pueden usarse durante mucho tiempo.

Guantes y manoplas exfoliantes

Generalmente para ser utilizados en la ducha, aprovechando la "Lubricación" del gel de ducha, se colocan a medio camino entre el exfoliante y el cepillo seco.

También en este caso la ventaja radica en el hecho de que cuestan muy muy poco y que se pueden usar muchas veces antes de ser reemplazados.

Exfoliantes químicos

Este tipo de exfoliantes se utiliza más para el rostro que para el cuerpo. Como explicamos en la introducción de esta guía de compra, los exfoliantes químicos deben considerarse lo contrario a los mecánicos (cepillos, guantes) ya que no actúan mediante movimientos y frotamientos, sino únicamente de forma química.

Por lo tanto, se aplican y se dejan en el lugar, durante el cual actúan destruyendo la capa más superficial y más antigua de la piel, haciendo "aflorar" la capa subyacente.

Preguntas frecuentes sobre exfoliación corporal

¿Con qué frecuencia puedo usar el exfoliante corporal?

Depende del tipo de exfoliante y de la sensibilidad de tu piel. Un exfoliante moderadamente abrasivo en pieles no sensibles debe usarse un máximo de dos veces por semana.

¿Puede el exfoliante corporal irse por el desagüe?

Sí, los exfoliantes corporales usan sal, azúcar u otras partículas naturales no solo porque son mejores para la piel, sino también porque cuando se van por el desagüe no deberían contaminar .

¿El exfoliante corporal también se puede preparar en casa?

¡Por supuesto! Puede usar un agente suavizante de su elección, como azúcar blanca, morena, sin refinar, sal, sal gruesa, café. Como portador puede utilizar aceites de oliva, coco, almendras u otros vegetales. Si quieres puedes hacerlo aún más complejo añadiendo aceites esenciales o aloe vera. ¡Mientras use ingredientes naturales y seguros, puede dejar volar su imaginación!

El exfoliante corporal me causó irritación: ¿qué hacer?

Antes que nada debes entender si la causa es el efecto mecánico-abrasivo del exfoliante o alguna alergia a los ingredientes. Si es alérgico a uno de los componentes, dependiendo de la gravedad puede esperar, tomar algún medicamento o consultar a un médico.

Si, por el contrario, la irritación fue causada por una abrasión demasiado intensa, aún debe dejarla pasar o aplicar una crema farmacéutica calmante especial. Te recordamos que escuches a tu cuerpo: si la piel duele o arde, no insistas en la zona que estás exfoliando.

¿La exfoliación corporal debe hacerse antes o después de la ducha?

No hay reglas precisas al respecto. Si el exfoliante es además de limpieza, se puede utilizar como gel de ducha o integrado con él. Si, por el contrario, el exfoliante es a base de aceite, generalmente deja muchos residuos en la piel, incluso después de enjuagar con agua.

Sin embargo, realizar el exfoliante después de la ducha tiene numerosas ventajas: la piel queda muy suave, especialmente después de una ducha caliente, y el exfoliante es capaz de actuar mejor y penetrar más profundamente.

Conclusión

Un exfoliante es un excelente hábito para incluir en tu rutina de cuidado corporal y personal. No es solo un tratamiento estético, sino un producto que aporta muchos beneficios a nuestra piel y a nuestro organismo en general.

Tanto si eliges uno clásico, uno específico o decides hacerlo en casa, verás cómo tu piel cambia desde las primeras aplicaciones y ¡no podrás prescindir de él!

Recuerda, entre una sesión de exfoliación y otra, mantener tu piel hidratada, con una buena crema corporal hidratante y bebiendo mucha agua. ¡Esto hará que los beneficios del exfoliante sean aún más visibles!